La basílica del Pilar posee una historia muy interesante que seguramente nos ayudará a comprender su significado e importancia actual; el 11 de Junio de 1580, Juan de Garay fundó la ciudad de la Santísima Trinidad a orillas del Río de la Plata, y en homenaje a Pedro de Mendoza, le puso el nombre “Santa María de Buenos Aires” al puerto. El 24 de Octubre de ese mismo año. Se repartieron parcelas de tierra con límites, la mayoría de ellas se ubican actualmente en el barrio de la Recoleta, y algunas de éstas fueron donadas entidades religiosas; en 1717, se firma la escritura de compromiso entre el comerciante Juan de narbona y el capitán Valdez e Inclán; la misma le otorgaba a los frailes recoletos el derecho a construir sus conventos en zonas apartadas, ya que se dedicaban a la oración.
La basílica del Pilar empezó a construirse en 1715; en aquella época no se contaba con la presencia de varios arquitectos y a los pocos que residían en la región, se le confiaba la totalidad de los edificios. El primer claustro queda terminado en 1718, mientras que el segundo en 1721; en 1725, se termina la basílica del Pilar siendo muy probable que su fachada haya sido diseñada por el padre Bianchi. Mientras el sitio se terminaba, Narbona construía su casa al lado, en donde actualmente funcionan las oficinas del Cementerio de la Recoleta; el 12 de octubre de 1732 se termina la torre de 30 metros y se inaugura la basílica siendo hasta el día de hoy la Iglesia más antigua de la región conservada en estilo barroco. En 1779, la basílica del Pilar se modifica para ubicar el altar de las reliquias y el baptisterio enfrente creando un atrio cerrado, todo parecía marchar bien hasta que en 1821, el Gobernador Martín Rodríguez y su Ministro Bernardino Rivadavia, expulsan a los frailes recoletos expropiándolos de todos sus bienes conllevando a que la basílica permanezca cerrada por varios años. Recién en 1891 se amplió el templo y a comienzos del siglo XX se hacen algunas modificaciones que dañan su estilo exterior e interior, pero en 1932, gracias al arquitecto Millé, la basílica recupera su fachada original. La basílica del Pilar fue elevada a dicha orden en 1936 por el Papa Pío XI y declarada monumento histórico nacional el 21 de mayo de 1942.
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