HABÍA UNA VEZ TRES POETAS QUE SE ENCONTRARON EN DERREDOR DE
UN BALCÓN. ALLÍ SE DIO ESTE DIÁLOGO Y SE GESTÓ ESTA PEQUEÑA OBRA DE TEATRO DE
TRES ACTOS...
ACTO I por JHOSEMARÍA DE NIRO,
ANDRÉS GRENOUILLE Y
ANY CARMONA:
ANY (mirando el cielo desde el balcón):- ...¿Cómo agradecer a las nubes esa abundancia? ¿Cómo, si no pueden alcanzarme? Una y otra vez escapo de su riqueza. Es que simplemente no las
merezco –
ANDRÉS (desde la calle):- ¡Ay! Ese Yo nuboso, tan distante a los dedos
distraídos. Sólo el que desnude su ser podrá sentir alguna cosa que no sea su
deseo. ¡Ay! otredad infiel, déjate sentir por mis dedos de pan... -
ANY (muy emocionada):- Quiero abrir mi costado dormido a los dedos gigantes de
tu alimento. Ser humedal que cobija la semilla de tu otredad blanda y tibia.
Marca con tus vocablos amados, los caminos. Quiero, en ti, encontrar ese yo en
fuga – (pausa) – Palabras, palabras, palabras diáfanas. Van
desde la raíz hacia las copas y desde allí al infinito. Ellas no son
abandónicas. Solo están vagando en el espacio oscuro en búsqueda de un renglón
que las pueda iluminar.
ANDRÉS (visiblemente enamorado):- Aves que vuelan borrachas de luz, fieras que muerden
con los ojos cerrados, granizo que perfora los pechos temerarios...
inmisericordes palabras aquí me tienen, soy un cosmo-errante de vuestro vacío
perenne –
ANY (extendiendo su mano hacia Andrés): - Que perforen mi pecho pletórico de miel y almendras.
Ellas cual notas musicales en un pentagrama de viento y furia, son las únicas
capaces de anclar un infausto corazón. Luego déjame atravesar flotando el
agujero negro de tu espacio.
JHOSEMARÍA (quien pasaba por ahí y escucha el diálogo, aplaudiendo): - ¡Bravo por los dos poetas que
regalan ese contrapunto para dejarme sin
palabras! ¿Cómo explicar el acontecimiento
cósmico de almas que se encuentran en la distancia y no por azar? Cuanto más
evoluciona el alma humana, más se acerca a lo mágico. La vida, el amor, no son
más que eso –
ANDRÉS (desviando la mirada): - Sí, somos magia y acto, somos carne y cosmos, nos
jugamos la vida entre dos universos –
ANY: - Almas gemelas se deslizan por playas luminosas de
universos paralelos ¡Sea este, el tiempo de su orgía! – (Termina de decir, cierra la ventana y baja corriendo, las escaleras).
FIN DEL ACTO I
ACTO II por JHOSEMARÍA DE NIRO,
ANDRÉS GRENOUILLE Y
ANY CARMONA:
Andrés y Any están ya en el centro de una calle totalmente transitada por gente
apurada y ensimismada en su propia individualidad. Se encuentran
para continuar su charla.
ANDRÉS (con la acrática euforia de un infante) - Será mejor que
vueles escalera abajo, porque la incertidumbre será rauda asesina y preciso a
la claridad redentora. Díganme señores poetas, ¿dónde viven los versos que
invocamos hoy aquí?.. les pregunto, señores poetas míos ¿dónde nace la poesía
que se eyacula de nuestras gargantas?.. ¿vienen del mismo sitio vuestras odas y
mis sentencias? ¿acaso es arbitraria la belleza que parimos?.. Alcen la voz,
certísimos dioses, den respuesta al interrogante silencio ¡que el delirio
continúe! --
ANY - La poesía que nace de mi triste corazón es la imagen
viva del cielo que me cubre... Solo la presencia de las amadas letras que
profieres, puede atenuar el ardor de mi ávido corazón... ¡Espérenme, mis poetas
queridos!... Veo una esperanza salvadora que me llama... Voy a mis hermanos de
dialécticas virtudes para encontrar un paréntesis del dolor... (corre con
un brazo extendido señalando el lugar donde Andrés recita...)
JHOSEMARÍA (mirando a los poetas y haciendo sonar algunas notas en su guitarra): - La poesía esperaba dar su grito antes que nosotros
pudiéramos nombrarla. Cuando el universo era solo silencio ni siquiera existía
porque él ES desde que una criatura pudo pensarlo al contemplarle. Y si la
palabra es la conciencia práctica, la poesía es el lenguaje del silencio, la
traducción de lo inconsciente... Igual que el cosmos o el misterio de la vida ya
estaba allí hasta que alguien la tradujo con sonidos guturales... dándole forma
poco a poco... igual que Michelángelo Buonarotti sacaba las sobras del mármol
para desnudar la escultura escondida en el silencio uterino de la piedra. ( Se
da media vuelta, con desdén porque se le ha desafinado la guitarra...)
ANY - (visiblemente asombrada por la actitud del poeta que
pasa) ¡No huyas juglar!... Solo tú puedes sacar de las cuerdas, los acordes
musicales necesarios para dar sentido a la belleza de un encuentro
fortuito... ¿No ves que los versos que invocamos hoy son los artífices de
nuestro vuelo esencial?
JHOSEMARIA - Gracias
por oir lo que no fue sino una reflexión nacida de vuestra inquietud. Pero he
de deciros, poetas verdaderos, que soy un simple cantor de la calle y apenas
sobrevivo entre la indiferencia y la mediocridad de las gentes atrapadas en sus
pequeños mundos sin sentido, atados a cables y auriculares que dominan las
conductas y abortan los sueños. Si, hasta eso han conseguido dominar, LOS
SUEÑOS. ¿Os dais cuenta bellacos? ¡LOS SUEÑOS!!! Ellos también vienen listos
para ser consumidos (pausa). Entonces lo mío es una reflexión nacida del simple
ejercicio de supervivencia (pausa). Entonces, mis cuerdas nada podrán decir. La
poesía, la literatura es el lenguaje de la soledad y del silencio. Ya no canta
mi guitarra sino para mí. Pero me queda la poesía para vivir y (pensando) tal vez para
encontrar a alguien como espejo dichoso de mi mismo ( mira su guitarra que
tiene cogida por el mástil, hace un gesto de "he dicho" y da la
espalda a la escena).
ANDRÉS - (se dirige a Jhosemaría): ¡No huyas juglar! Si la belleza es anterior a
nuestras voces, pues entonces que se deje ver, que se muestre ya. Si lo
sublime era ya antes de que fuéramos nosotros, pues entonces que arremeta
contra la quietud, que nos mate y nos reviva y nos mate y nos reviva, que nos
cure y nos enferme y delire y dé conciencia, que se afirme y se niegue y delire
y dé conciencia, que sea, que sea ¡pero ya! Las cuerdas flojas también
vibran, también son y quizá son de una manera más basta ¡No huyas juglar!
suelta tus dedos que los instrumentos desafinados resultan más profundos.
Ante las palabras de Andrés, Any y Jhosemaría se miran. Ella
extiende una mano al cantor callejero y otra al joven poeta, luego
dice:
ANY - ¿Dónde están las amapolas y los lirios del lejano
campo?¿Dónde las mariposas lunares susurrando sus aleteos?¿Y las lavandas
envueltas en rocíos de azahares añejos? Todas vinieron a nosotros para llenar
una cesta que cubierta de tules y moños encerró escondidos, los besos. Secretos
de amor futuro, regalos de cosechas plenas, perfumes de íntimos deseos ¡Sea
la Belleza el triunfo de nuestro ser! ¡Hecho grito inmortal, salga de
nuestras gargantas, el Amor sublime ! ¡Vengan mis amados poetas, a beber en
los prados del sur, la vertiente crepuscular de los sueños. Solo para que el
presente sea metamorfosis del cielo!
FIN DEL ACTO II
ACTO III por ANY CARMONA
ANY (mirando a los poetas que se retiran): - ¡Poetas, vengan, no me dejen, vamos a crear la
Belleza! Música, Sensibilidad y Juventud están destinadas a unirse para
preservar lo Sublime. Amados míos, nosotros somos los paradigmas de la
preservación de la Esencia, del Ser, de
lo Verdadero. Vengan conmigo, hombres hacedores de Magia. Yo sola no puedo. ¡Como
mujer cercana a lo Vital, os conmino a no abandonarme! ¡Venid, venid a mí,
mis amados! (Abre los brazos en espera mientras los mira a ambos en forma
alternada -Pausa) - El sol, la tierra, el aire, el mar, no son simples vocablos
para designar objetos inanimados. El sol es el faro que ilumina los actos de
los hombres y mujeres en el planeta-madre. La tierra no es ese astro azul que nos acoge y nos da vida, es una
burbuja de jabón sobre la mano de Dios. El aire no es el elemento gaseoso que
penetra por nuestras fosas nasales, es el "prana", la energía, el hálito
refrescante que enciende el fuego del amor. El mar no es agua en movimiento,
es flujo que corre por las venas abiertas de la piel del universo. Las palabras
no son símbolos para comunicarnos, son el óleo que cargamos en los pinceles del
alma, son las piezas de un rompecabezas infinito que es comienzo y fin de
nuestra existencia. Manipularlas a nuestro antojo, son el acto mismo que da
inicio al Arte, único ente capaz de preservar la Felicidad. Por eso, (gritando con gesto de desesperación ) ¡vengan,
poetas míos, vamos a crear una realidad digna de ser defendida y vivida de aquí
en más!
ANDRÉS: Mira a Any con luz en la mirada. Se queda parado con
el brazo extendido hacia ella y no dice nada.
JHOSEMARÍA: Se va caminando
sin mirar atrás.
ANY (con gesto de desdén): Hombres descreídos del Amor, de la
Belleza, de la Mujer. ¡Vayan a luchar sus propias guerras, a cazar en el ruedo
de la Vida, quién sabe qué conquistas! Yo caminaré, fiel a la luna, hacia la
cima de mis más grandes anhelos. Para que el presente, sea la emulación del
Cielo y el futuro, un ángel de Luz… (Se da media vuelta y comienza a caminar sola por la calle,
con la cabeza baja y los brazos caídos. En ese instante van saliendo de las
puertas, de las ventanas, de las esquinas, personas de ambos géneros y de
variadas edades, que la siguen.)
FIN DE LA OBRA –
BAJA EL TELÓN.
Me encantó!!!!! Debemos seguir creyendo.....
ResponderEliminarGracias querido Quique, por leer nuestra humilde obrita de teatro y pensar que la poesía vale la pena...Besos...Any
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