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miércoles, 6 de octubre de 2010

ARGENTINA EN LA FERIA DE FRANKFURT, ALEMANIA

Así se ve el pabellón F1 del gigantesco Centro de Convenciones de la Feria de Frankfurt, que este año tiene a la Argentina como país invitado de honor. Se le asignó a nuestro país un espacio de 2500 metros cuadrados en la mayor vidriera del mundo editorial. La piel eran esas enormes lonas traslúcidas diseñadas por el aquitecto Atilio Pentimalli que cuelgan del techo y envuelven todo el espacio con volúmenes y pasajes laberínticos que invitan a descubrir esas entrañas que anoche seguían tomando forma de la mano de un ejército de operarios alemanes que trabajaban contrareloj para que hoy, a las cinco de la tarde, se inaugure oficialmente el pabellón con la presencia de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y un esperado discurso de la escritora Griselda Gambaro.
En esos paneles ya asomaban las giganografías de Borges y Cortázar, de Evita y el Che, de Gardel y Maradona. Entremezclados con ellos aparecían frases –en castellano y alemán– de algunas de las obras más célebres de la literatura argentina. Con esmero y guantes blancos, varios empleados iban colocando en otro laberinto dedicado a nuestros escritores, primeras ediciones de obras de Martínez Estrada, Victoria Oampo, Arlt, Mujica Láinez, Puig y Quiroga. El sector de derechos humanos era el que más avanzaba hacia su fisonomía definitiva, con fotos de escritores desaparecidos –Rodolfo Walsh y Haroldo Conti a la cabeza–, títulos que denunciaron la dictadura, una gigantesca foto del juicio a las juntas militares. Otro sector, ya terminado, está dedicado a las provincias argentinas, con fotos de sus paisajes y monumentos, y un enorme mapa a ras del suelo sobre el que se dibujan con efectos de luz postales de la Argentina.
Los juegos de luces tendrán un enorme protagonismo en ese laberinto diseñado por el arquitecto Pentimalli, que ayer daba vueltas por todo el pabellón con una mezcla de éxtasis y ansiedad. “Los alemanes entran y se quedan mirando todo, como hipnotizados. Es la primera vez que un país utiliza el espacio completo del pabellón con una idea integral”, contó a Clarín .
El domingo 10 será el día en que se habilitará la entrada también al público. Entonces habrá un balance de la huella que la Argentina dejó en esta Feria. Los escritores son un apéndice necesario: sólo el país invitado trae a tantos -60 en nuestro caso. Habrá figuras como Günter Grass o Ken Follet, porque después de todo, ésta es una Feria levantada gracias a las palabras. Si dominarán las impresas o las digitales está por verse.

(Fuente: Clarín - 5/10)
REPORTAJE A COSCIA
El secretario de Cultura de la Nación, Jorge Coscia, afirmó hoy que la feria del libro de Frankfurt, la más grande del mundo y de la cual Argentina es este año invitada de honor, permite que despleguemos todo nuestro potencial cultural, con la presencia de escritores, músicos y artistas.Coscia explicó a Télam en que consiste el convenio que se firmará con el Instituto de Investigaciones sociales de esta ciudad, más conocido como Escuela de Frankfurt: Es una corriente filosófica de entreguerra que tiene representantes como Adorno, Benjamin, Fromm y Marcuse, para nombrar sólo algunos.Un dato interesante, que remite a la Argentina, es que uno de su impulsores es Félix Weil, un argentino hijo de alemanes que fue uno de su pensadores y sostuvo económicamente a este instituto, brindándole la posibilidad de una publicación periódica, agregó Coscia.El funcionario explicó que el acuerdo marco que se firmará plantea un trabajo a futuro de enriquecimiento mutuo.En otro orden, el Secretario de Cultura manifestó que también ha venido a Alemania una muestra del Museo Eva Perón y para ello viajó su directora, Cristina Alvarez Rodríguez.La presencia de Evita en esta ciudad también es notoria en las calles, con carteles y publicidades que remiten a la ópera Evita, que se está exhibiendo en la prestigiosa Alte Oper de Frankfurt, equivalente local del porteño Teatro Colón.A esto hay que sumar la presencia de Baremboin, Rodolfo Mederos, Lidia Borda, las muestras en el museo judío de Frankfurt y de Berlín...en síntesis la feria del libro nos permite desplegar nuestro potencial cultural y nuestra mirada, finalizó Coscia.

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